parece extraño pero hay días en que me siento
y me pienso y no sé lo que espero
no sucede a menudo pero admito que hay días
en que salgo a la calle y me miro los pies
para confirmar que llevo la cabeza
busco una señal hasta en las cosas que conozco de memoria
como el padrenuestro que no rezo
casi todas las noches me atrapa la ilusión
de una palabra que cuido como promesa de amor
pero confieso que hay días en los que abro
la puerta de mi casa y todo está
tan a la vista que no sé
a pablo
el pronóstico decía parcialmente húmedo y nublado
vientos leves a moderados del sudeste
doce grados de máxima ocho de mínima
y en el horóscopo se podía leer textualmente
probable propuesta de un viaje corto, piénselo,
el treinta y uno de julio de mil novecientos setenta y seis
hace veinte años que según el tango
son nada algunas de estas cosas
te estaban destinadas en el diario, no olvidamos
ni perdonamos, te recuerdan siempre tu mamá
sergio y claudia
a gabriel celaya
que dejé varias hojas en blanco
y amé la idea de vivir
muchos sueños quedaron
colgados sobre esa almohada y esta percha gris
apagué luces que debieron quedar encendidas
llegué temprano donde debía llegar tarde
y un día de julio se perdió conmigo
que de algunos pasados nunca regresé
deserté de batallas que no estaban perdidas
me ocupé por tener la tierra bajo los pies
y sentí en los ojos la ausencia de las cosas